…y en una provincia muy, muy al norte de Argentina, fue presentado el cuarto telescopio más grande del país. El Observatorio Astronómico de las Misiones está listo para abrirse al público en general y para delegaciones educativas.
El ambicioso proyecto del Centro Educativo en Ciencias de la Tierra y el Espacio “Buenaventura Suaréz – Carl Sagan – Stephen Hawking” comienza funcionar con la pronta inauguración del Observatorio Astronómico de las Misiones. Días pasados se realizó una presentación a la prensa, en la cual se pudo realizar observaciones con el telescopio. La presidenta del Parque del Conocimiento, Claudia Gauto, destacó que el Parque del Conocimiento se convierte en “referencia en la astronomía en la región. Misiones, una vez más, es vanguardia y punta en las ciencias”. En el mismo marco anunció la inauguración del observatorio para el mes de marzo, con distintas actividades.

“Es el cuarto telescopio más grande del país, con tecnología de punta y con el que se pueden hacer observaciones astronómicas, fotografía astronómica y realizar contenidos científicos y educativos”, manifestó el astrónomo Luis Martorelli, Director del Laboratorio de Óptica, Calibraciones y Ensayo de la Universidad Nacional de la Plata, entidad con la que se desarrolló conjuntamente este proyecto de estudio de Ciencias de la Tierra y el Espacio.
“El Observatorio de las Misiones generará contenidos no sólo educativos, de formación y de información, sino que también apunta a despertar la curiosidad de los alumnos de los niveles primarios, secundarios y universitarios, así como de la sociedad en general, una actividad que los incentive en el estudio de las denominadas ciencias duras. Física, Matemática, Química, como una manera de movilizar vocaciones que vayan en el sentido de ese tipo de profesiones que la provincia necesita”, agregó Claudia Gauto.
“No se fabrican todos los días los telescopios de este tamaño. Este fue comprado especialmente desde Misiones para Misiones. Es decir, no hay otro igual”, expresó el astrónomo Martorelli. Para concluir señalando “esto fue un pequeño resumen tecnológico para que entendamos porqué este equipo es tan importante: porque es único”.

Características técnicas
Con una cúpula de 12 m y una óptica de 600 mm de diámetro, el telescopio del Observatorio Astronómico del Parque del Conocimiento se constituye como un pilar fundamental para el acceso de la población misionera a la ciencia de la astronomía tanto a nivel científico como social, filosófico y educativo.
De esta manera, los visitantes podrán disfrutar del cielo misionero con una calidad y precisión nunca antes vista, como en el caso de la Nebulosa de Orión, formadora de estrellas y sistemas solares, cuya distancia de 1.200 años luz la convierten en un objeto fantástico para su estudio y observación, incluyendo su núcleo de seis estrellas, las cuales se pueden ver a la perfección mediante el telescopio. Además se podrán visualizar detalles excepcionales de la Luna, como sus cordilleras, valles y cráteres.
Descripción
A nivel técnico, el telescopio consta de tres partes principales: la óptica, la mecánica y los accesorios periféricos.
Óptica: consta de una configuración de espejos reflectores tradicional (tipo Cassegrain) diseñada en 1660 y típica de los grandes telescopios hasta la actualidad. Como en todo telescopio reflector, el primer espejo es cóncavo y el segundo convexo. Esta distribución geométrica de las ópticas hace que los rayos crucen por el agujero central del espejo primario hacia atrás y permite mirar por atrás como si fuera un telescopio común refractor. Pero hay más: antes de que los rayos lleguen al ojo, hay tres lentes correctoras, las cuales permiten que se pueda observar en el cielo un campo de visión más amplio además de minimizar defectos y aberraciones ópticas. Este instrumento trata de corregir todas estas aberraciones con esa mezcla de espejos y lentes, por eso se llama catadióptrico.
Mecánica: el tubo está colocado de tal manera que pueda contrarrestar la rotación de la tierra en su seguimiento de los astros a lo largo del cielo y a lo largo de la noche. El telescopio tiene una montura llamada “ecuatorial de horquilla”, que toma el tubo y rota paralelo al eje de rotación de la tierra. Esa horquilla está orientada al Polo Sur celeste y la mecánica de movimiento está controlada por servomotores y un programa de computadora que permite no sólo buscar los astros sino también mantener el guiado correcto y luego hacer todo tipo de fotografías u observaciones científicas.
Accesorios: el telescopio cuenta con una serie de accesorios que, en este caso, fueron acondicionados para seis temas distintos, los cuales pueden ser utilizados en muchas cuestiones que tienen que ver con aplicaciones científicas, aplicaciones de extensión y de índole educativa.
Estos accesorios son: dos cámaras de alta resolución llamadas CCD y CMOS, ambas montadas en la misma cúpula y que, combinadas con 10 filtros, permiten obtener imágenes estelares con altísima definición evitando defectos producidos por la atmósfera, o incrementar de alguna manera el espectro visual de gases en algunos de los cuerpos que estamos mirando. Por ejemplo el oxígeno es azul, el nitrógeno es rojo, etc. Otro accesorio importante son los oculares, o sea donde se apoya el ojo. Este instrumento viene con dos oculares de última generación que permiten generar aumentos entre 180 y 250 veces la capacidad del ojo humano. Ambos, además, viene equipados con un anillo para conectar una cámara de alta sensibilidad.
Con condiciones meteorológicas favorables, el Telescopio del Parque del Conocimiento permitirá la observación directa de los planetas, Venus, Saturno, Júpiter y Marte, además de los cráteres, valles y montañas lunares. Esto permitirá el estudio de una diversidad de otros objetos que hay en el cielo, como las nebulosas, cúmulos globulares, galaxias y mucho más.
Un comentario en “En una galaxia muy, muy lejana…”